El conocimiento de sí mismo, el primero de los cuatro pilares del liderazgo jesuita, es el fundamento de loso otros tres. El ingenio, innovación confiada y optimista, gira alrededor de la indiferencia, o sea la libertad para interpretar y responder a un mundo cambiante. El amor, que consiste en tratar al prójimo con una actitud positiva y alentadora, proviene de la visión global establecida en la contemplación para alcanzar el amor. Y el heroísmo nace del espíritu de magis, respuesta reflexiva que lo mantienen a uno motivado por metas personales ambiciosas (Lowney, 2005: 111-112)
Después de mi viaje a Colombia, invitado por la Pontificia Universidad Javeriana, en su Facultad de Ciencias Económicas y y Administrativas, y en una cena con algunos de los miembros del Comité Privado de Competitividad de Colombia, quiero recuperar dos post publicados con anterioridad y que considero más que actuales sobre el liderazgo ignaciano. Y los recupero no tanto como un recuerdo de un hombre que cambió el mundo y que profundizó en el autoconocimiento como nadie mediante su libro Ejercicios Espirituales, sino como un sistema de liderazgo vigente en la actualidad como sistema de desarrollo, emprendimiento, innovación y competitividad organizativa.
Los jesuitas, San Ingnacio, no sólo acertaron en el qué -definición de los principios emocionales del liderazgo -y que coinciden sobre manera con los de Goleman- sino que definieron el cómo. Y ese cómo no sólo quedó reservado para los dirigentes de la compañía sino que se realizaron un programa para generar la IE en todos los novicios quedando, de esta manera, extendido su concepto de liderazgo a toda la organización y multiplicando su potencial de acción.

Esta metodología se fundamenta en cuatro pilares básicos:
Conocimiento de uno mismo: el autoconocimiento es una actividad que dura toda la vida, nunca se termina. El liderazgo comienza por
saber liderarse a uno mismo. Es la base del resto de principios, la base del liderazgo y la base de la IE. La persona entiende lo que valora y lo que quiere, se basa en determinados principios y afronta el mundo con una visión coherente (26). Es el camino de la automotivación (IE). También hace que nuestras creencias básicas no sean negociables. El liderazgo más inspirado y motivado tiene que ser autoiniciado y automotivado.
Ingenio: entendido como indiferencia (desapego), optimismo para de esa forma poder ser adaptables, creativos, audaces…para ponerse a las órdenes del proyecto, para poder liderar con optimismo, para abrazar el cambio. Una forma de aceptar el cambio y la excelencia.
Amor: estar comprometido con el potencial humano, querer que lo desarrollen en toda su potencialidad. Crea lazos entre los miembros del equipo, mantiene la unión del equipo y la orientación a las metas. Facilita la comprensión entre los colegas. Es una forma de ver el mundo (teorías X e Y de McGregor). Comienza con la visión del mundo y pasa luego a la acción. Amor expresado en hechos y no en palabras.
Heroísmo: automotivación + magis. Bajo el magis, que transforma las metas de la compañía en metas personales. Magis como forma de pensar en grande y ponerse metas muy retantes, de automotivarse. El magis crea un liderazgo de abajo a arriba, lo que no significa que sea un liderazgo democrático, sino un liderazgo automotivado. Hace abrazar el riesgo con optimismo, siendo el conservadurismo malo para el líder. (más…)
Me gusta esto:
Me gusta Cargando...